Utilizar el crédito en una crisis: ¿una buena idea o una mala decisión?

Incluso con un presupuesto bien controlado, nadie es inmune a un golpe financiero. La pérdida de un empleo, una gran factura imprevista, la avería de un electrodoméstico o incluso una avería importante del coche son circunstancias que a veces hay que afrontar.

Si bien los ahorros de emergencia son ideales para este tipo de situaciones, no todos tenemos las reservas necesarias para afrontar las cosas que nos depara la vida. Eso nos lleva a ver el crédito como una forma de cerrar la brecha. Pero ¿cuáles son las ventajas y desventajas de este enfoque? 
 

¿Qué tipo de crédito hay disponible?

En caso de un gasto imprevisto, los préstamos de crédito al consumo son una forma tentadora de pagar una factura. Estos varían en tamaño y pueden ser prestados por un banco u otras instituciones financieras y empresas.

Esto podría incluir:

  • Crédito para financiar un bien como un coche o un mueble. El crédito suele ser ofrecido por el vendedor y la venta se cancela si se rechaza el crédito.
  • Préstamos que puedes utilizar como mejor te parezca y que se reembolsan con el tiempo.
  • Facilidades de pago que ofrecen los supermercados y otros comercios.

Solución rápida y fácil

La principal ventaja del crédito al consumo radica en la rápida disponibilidad de dinero que luego podrás reembolsar poco a poco. Este tipo de crédito se beneficia de un marco legal que protege al consumidor: en particular, tienes un plazo para desistir si entretanto encuentras otra solución.

El crédito al consumo suele ser más barato que un descubierto bancario autorizado, cuyo coste puede resultar exorbitante si no se reembolsa rápidamente. Sin embargo, debes evitar ponerte en una situación de endeudamiento aún más complicada solicitando un préstamo para cubrir su sobregiro. Si tus deudas aumentan vertiginosamente, busca asesoramiento financiero y habla con tu acreedor o con tu banco.

Por último, el crédito al consumo suele poder canjearse anticipadamente sin penalización, lo que da la flexibilidad de terminar con la deuda lo más rápido posible.

Peligros ocultos

La decisión de conceder o no el crédito la toma el acreedor/banco y dependerá de tu solvencia y capacidad de pago. Si bien un préstamo u otro crédito dan un respiro temporal, habrá que reembolsarlos a medio o largo plazo.

Dependiendo del tipo de crédito elegido, el coste del préstamo puede ser especialmente alto. El crédito al consumo es la principal razón del sobreendeudamiento de los hogares. También da la ilusión de poder comprar todo en cualquier momento.

Es importante no caer en esta trampa y tener en cuenta los plazos de amortización, incluido el tipo de interés y las distintas comisiones que puedan aplicarse. Asegúrate de tener suficiente para vivir mientras realiza los pagos mensuales que acuerde.

Al utilizar el crédito, tiene sentido elegir un préstamo único y específico durante el menor tiempo posible mientras vuelves a encaminarte.